Sobre una nota publicada por Infobae
Por Fundación Rosa Luxemburgo
La Fundación Rosa Luxemburgo (FRL) habría recibido grandes montos de dinero desde el exterior, dice la nota, y “se supo que el número no se corresponde con la actividad habitual de una fundación, mucho menos en el caso de esta ONG, que no registró actividad durante años”(sic).
Lamentamos que no se nos haya consultado en ningún momento antes de la publicación de esta nota sin firma, donde se insinúa que posiblemente apoyaríamos a “activistas radicalizados”, en un contexto donde “Muchas organizaciones no gubernamentales están en la mira de diversos gobiernos porque en su funcionamiento hay elementos para sospechar que realizan maniobras de lavado de activos vinculadas al financiamiento del terrorismo internacional”.
Por el otro lado, se constata, correctamente, que la FRL opera en Argentina desde 2015. Declaramos que desde entonces, cada centavo que ha ingresado a Argentina proviene de nuestra sede en Berlín, que a la vez recibe todos estos fondos exclusivamente del Ministerio Federal para la Cooperación Económica y el Desarrollo (BMZ). El presupuesto de la Fundación se aprueba anualmente en el parlamento federal alemán.
Desde el comienzo de nuestras actividades, tanto el gobierno argentino como la embajada alemana están informados sobre nuestro trabajo, y cumplimos con todos los requerimientos legales. Por supuesto, siempre estamos a disposición para prestar todas las informaciones contables necesarias a las autoridades pertinentes.
En la lógica y los lineamientos que rigen a todas las fundaciones políticas alemanas que trabajan en Argentina, nos dedicamos a la formación política (conferencias, talleres, publicaciones, etc.), junto con nuestras contrapartes de la sociedad civil argentina, que se ubican en el campo de la izquierda democrática. En nuestra página web, informamos sobre estas actividades con total transparencia.
Finalmente, no nos vemos como una “fundación anti-globalización”. Somos una organización internacionalista que trabaja por los derechos sociales globales, la democracia y la justicia climática – si se quiere, por una globalización solidaria desde abajo.
Elisangela Soldatelli, directora de la oficina en Buenos Aires
Torge Löding, director de la oficina regional para el Brasil y el Cono Sur