A principios de 2020, los gobiernos de Argentina y China anunciaron un acuerdo para que nuestro país produzca grandes cantidades de carne porcina para exportar al gigante asiático.
A causa de los desastres que produjo la peste porcina africana en su territorio, China sacrificó el 40% de su stock de cerdos. Esto la empujó, en un contexto de crecimiento del consumo, a buscar el faltante de carne fuera de su territorio, en países como Argentina.
La propuesta llegó cuando el gobierno nacional actual apenas había asumido, con una crisis de deuda externa fuerte y con algunas definiciones claves en manos de funcionarios afines a los agronegocios.
Las consecuencias negativas de la ganadería industrial son muchas y son graves. La iniciativa del acuerdo tuvo un muy amplio repudio por parte de la sociedad argentina: productorxs, consumidorxs, movimientos sociales, intelectuales y activistas exigieron el rechazo al acuerdo y reclamaron políticas públicas para la producción local y para alcanzar, de una vez por todas, la Soberanía Alimentaria.
Este informe pertenece a la serie «Amenazas a la soberanía alimentaria en Argentina» realizada con el apoyo de la Fundación Rosa Luxemburgo.
– Para descargar el informe completo (PDF), haga clic aquí.
#Podcast
Megagranjas porcinas: más control corporativo y nuevas pandemias
En este cuarto y último episodio de la serie «Amenazas a la Soberanía Alimentaria en Argentina», dialogamos sobre el acuerdo porcino con China, sus avances, las posibles consecuencias de la instalación de las megagranjas y las alternativas que se nos presentan para no ser una nueva fábrica de pandemias.
Entrevistamos a Karina Forcinito, economista e investigadora y a Pablo Varela, biólogo. Tanto Karina como Pablo son docentes de universidades públicas e integrantes de la Asociación Argentino-Uruguaya de Economía Ecológica. También hablamos con Marcos Filardi , abogado de derechos humanos y soberanía alimentaria; integrante de la Red de Abogadas y Abogados por la Soberanía Alimentaria (Redasa) y Museo del Hambre. También contamos con la voz de Erika Solis, de la Unión de Trabajadoras y Trabajadores de la Tierra (UTT) que nos presenta otro modo de producción ganadera.
Animación
Argentina y China se encuentran negociando un acuerdo para que nuestro país produzca 900 mil toneladas de carne de cerdo. Con la necesidad de dólares como excusa, el gobierno apuesta, una vez más, al extractivismo para salir de la crisis.
Las megagranjas no sólo están lejos de ser una forma de producción sustentable, sino que también son lugares ideales para la generación de nuevas pandemias, como la que estamos atravesando hace casi dos años.
El acuerdo porcino tuvo un amplio repudio por parte de la sociedad argentina por los diversos riesgos que implica la ganadería industrial, que van desde el consumo excesivo de agua y contaminación por efluentes, impactos sanitarios, el avance del desmonte, el quiebre de pequeñas granjas hasta el posible potencial pandémico.
Te invitamos a ver de qué se trata este acuerdo y cuáles son los riesgos socioambientales que podría traer.