La extrema derecha gana terreno en Alemania

Texto: Ana Ferraro

Por primera vez desde la época nazi un partido de extrema derecha salió primero en unas elecciones estatales alemanas.  Alternativa para Alemania (AfD) se convirtió en el partido más fuerte en el estado federado de Turingia en las elecciones del domingo 2 de septiembre.

El partido obtuvo el 32,8% de los votos en Turingia, superando casi un 10% al segundo clasificado, el partido conservador cristiano (CDU). En Sajonia, un estado federado vecino, donde también se celebraron elecciones el 2 de septiembre, la AfD quedó en segundo lugar con el 30,9% de los votos, justo por detrás de la CDU (31,9%).

El gran perdedor de las elecciones fue el Partido de la Izquierda (Die Linke). Die Linke, que anteriormente gobernaba en Turingia, redujo a la mitad sus escaños, pasando del 30% al 14% de los votos. En Sajonia, Die Linke ni siquiera logró entrar en el Parlamento. 

Para comprender el impacto de estos resultados y de las narrativas antimigratorias propuestas por la derecha, la Fundación Rosa Luxemburgo conversó con Josina Monteiro, trabajadora social de Turingia y activista por la situación de las personas negras en Alemania.

Los efectos del auge del fascismo ya se sienten en el ánimo del país, especialmente entre migrantes y personas racializadas. Como señala Monteiro, «la cuestión de si quedarse o irse es una pregunta realmente difícil» y para muchos migrantes se ha vuelto una preocupación constante. Pero a pesar de este ambiente pesimista, Monteiro enfatiza la existencia de una contracultura en crecimiento, que le brinda esperanza: «Acá también hay muchas voces a favor de una sociedad abierta, diversa y antirracista, y me dan mucho coraje cada día».

Sin embargo, según Monteiro, para que Turingia finalmente cambie de rumbo, no sólo se necesita coraje y contracultura en, sino también «una visión crítica de toda Alemania».

Fotos: Reuters

¿Qué es la AfD y cómo le fue al resto de partidos?

La AfD es conocida por su discurso anti-inmigración, abogando por fuertes restricciones a la entradas de inmigrantes e incluso promoviendo posturas de «remigración». Además, el partido representa un fuerte revisionismo histórico que banaliza al nacionalsocialismo. Björn Höcke, líder de la AFD en Turingia, ha sido sancionado ante varios tribunales por el uso de lemas nazis. La AfD también defiende la preservación de los roles de género «tradicionales» y se muestra escéptica ante los derechos de las personas queer en Alemania. 

Los resultados de las elecciones reflejan un gran descontento con los partidos gobernantes a nivel nacional. La campaña electoral estuvo dominada por cuestiones polémicas como la política de inmigración y la postura de Alemania en la guerra de Ucrania, aunque estos temas realmente no se pueden decidir a nivel federal. En consecuencia, las elecciones representaron una derrota para los tres partidos gobernantes de la coalición «semáforo», los socialdemócratas, los verdes y los liberales.

El canciller Scholz calificó los resultados electorales de «amargos» y llamó a los demás partidos a seguir  el principio del «cordón sanitario», es decir, no formar coalición con la AfD.

El partido socialdemócrata (SPD), al que pertenece el canciller, así como otros partidos, se dejaron llevar por la agitación anti-inmigración de la AfD y también hicieron campaña a favor de mayores restricciones a la inmigración y deportaciones. Las elecciones, por tanto, son una prueba más de que el uso de narrativas de «mano dura» por parte de los partidos de centro solo desplaza el discurso hacia la derecha y favorece a los partidos extremos.

Por el momento, no parece que la AfD vaya a convertirse en el partido gobernante en Turingia o Sajonia, ya que ninguno de los otros partidos quiere formar coalición con ellos. No obstante, cada vez será más difícil gobernar sin la AfD. En Turingia, por ejemplo, será necesario contar con los votos de la AfD para alcanzar la mayoría de dos tercios requerida para decisiones importantes sobre el presupuesto o la constitución del Estado.

 

Entrevista completa con Josina Monteiro en el canal de YouTube de la fundación Rosa Luxemburgo en Alemania: