Se cumplen 6 años de aquel grito colectivo, político y feminista que puso en jaque al sistema patriarcal en la Argentina, el “Ni Una Menos” apareció como una síntesis de la indignación contra todas las violencias machistas. Así como el “Nunca Más”, que funcionó como consigna de denuncia posterior a la dictadura cívico, militar y eclesial, nos remite a un proceso histórico y de visibilización de las organizaciones sociales y de Derechos Humanos. Hoy, el “Ni Una Menos” marca una nueva bisagra, un antes y un después, un sentido que se vuelve común y que visibiliza a todo un colectivo social ignorado por décadas.
Ciertamente fueron miles las luchas y resistencias feministas previas a este acontecimiento que posibilitaron su concreción, como la realización de los Encuentros Plurinacionales de Mujeres, Lesbianas, Travestis y Trans o como la creación de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito, entre tantísimos más. En los últimos años, todas estas experiencias se condensaron en una misma rabia y se fueron multiplicando hasta romper las fronteras. El “ya basta” a las desapariciones y femicidios de ese 3 de junio de 2015 impulsó un nuevo proceso de organización de los feminismos y contagió -en todo el mundo- las prácticas de sororidad del país de las Madres y de los 34 Encuentros Plurinacionales.
A continuación, los debates y propuestas se profundizaron y ya nadie duda que, en la actualidad, el movimiento feminista, de mujeres, lesbianas, bisexuales, travestis, no binaries y trans es el actor de cambio social más poderoso del mundo. En la Argentina, la organización multitudinaria potenció los procesos de construcción conquistando, incluso, algunas de sus principales luchas como el reconocimiento del derecho a decidir y la soberanía sobre los cuerpos tras la aprobación de la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo (Nº 27.610) el pasado diciembre de 2020.
Es desde allí que diferentes propuestas para una vida digna emergieron a través de los años y llegan a nuestro presente con fuerza de marea. Desde diferentes colectivos y espacios se ha decidido profundizar en la estrategia política contra las múltiples violencias sobre cuerpos feminizados. Entre ellas, el impacto de las políticas extractivas, el acceso desigual al hábitat, el no reconocimiento de las tareas de cuidados, la inequidad laboral, el endeudamiento y la precarización de la vida, y muchas más. En ese contexto se hace foco en las violencias económicas, entendidas no sólo como estructurantes de la desigualdad -que es de clase, género y etnia-, sino también como puerta para discutir nuevas formas de organización de la vida y de autonomía económica.
Así, la consigna del “Ni Una Menos” se amplía y se planta: ¡Vivas, libres y desendeudadas nos queremos! ¡Nosotras movemos el mundo, nosotras lo paramos! ¡Si nuestras vidas no valen produzcan sin nosotras! ¡Nuestro cuerpo, nuestro territorio! Y exige el reconocimiento de todos los derechos e identidades ¡Hasta que todas y todes seamos libres! Desconociendo las fronteras y construyendo feminismos transnacionales.
Por eso, desde la Oficina Cono Sur en conjunto con el Programa Feminismo Global de la Fundación Rosa Luxemburgo, acompañamos este nuevo aniversario del #NiUnaMenos en las voces y experiencias de los feminismos que, aquí y ahora, están discutiendo y proponiendo nuevas formas de organización para la vida digna.
En ese marco, nos tomamos el mes de junio para compartir una serie de actividades, materiales y propuestas realizadas en diálogo con diferentes colectivos y organizaciones feministas. De esta manera, nos proponemos -a través de sus experiencias- presentar los principales ejes con los que trabajamos y las reflexiones que construimos.
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Como decíamos, aprovechamos el aniversario de un nuevo #NiUnaMenos para compartir, a lo largo del mes, las diferentes propuestas e iniciativas feministas que acompañamos desde la Oficina Cono Sur y el Programa de Feminismo Global de la Fundación Rosa Luxemburgo. Pero, antes ¿Cómo se trabaja este eje desde la Fundación? Lo hacemos a través de los siguientes abordajes: Pedagogías populares; Violencias económicas; Extractivismo y Transiciones ecosociales desde una mirada Feminista y Hábitat, a través del acompañamiento a diferentes organizaciones y colectivas feministas. De todas formas, el enfoque feminista está presente en todos nuestros ejes de trabajo, ya que entendemos que es imprescindible transversalizar el debate de los feminismos en todas las dimensiones de trabajo político con el objetivo de prefigurar proyectos emancipatorios.
En esa línea, nos proponemos recuperar al feminismo como estrategia política a partir de la confianza en la pedagogía popular feminista como práctica para configurar transformaciones, no sólo frente a la precarización de la vida sino también en las transformaciones al interior de las organizaciones políticas y sociales de carácter emancipatorio. Esto lo hacemos a partir de las experiencias tan potentes que hay tanto en Argentina, Chile y Uruguay durante los últimos años de marea feminista. En ese marco, acompañamos procesos de sistematización de experiencias y de debate teórico, conceptual y político en clave de reflexión en torno a los feminismos populares. Qué son, por ejemplo, los feminismos populares, qué significa pensar desde los Ecofeminismos; cómo construimos Feminismos Decoloniales, antirracistas; cuáles son los debates en torno al problema de los cuidados, entre otros.
Por otro lado, en el actual contexto, damos especial énfasis al eje de violencias económicas entendiéndolo como estructurante de las múltiples violencias que atraviesan las mujeres y las disidencias. Este abordaje nos permite complejizar el debate que tienen los feminismos en torno al punitivismo como respuesta hegemónica para resolver las violencias y los femicidios en el marco del Ni Una Menos. Entendemos que la autonomía económica y la discusión de la economía popular desde los feminismos nos abren el camino para pensar las posibles interrupciones en el modelo de acumulación que genera las desigualdades. Hacer foco en las lógicas de endeudamiento, así como en las formas de dominación que la financiarización del capital impone sobre los cuerpos feminizados es una estrategia política para pensar en la superación de las violencias pero, sobre todo, nos permite prefigurar escenarios futuros que no sostengan al patriarcado como sistema de dominación.
En ese sentido, tenemos otra línea de trabajo que realiza una mirada crítica del modelo de acumulación actual en clave de los extractivismos y las propuestas que los feminismos anteponen desde una ética del cuidado. Creemos que, desde esta perspectiva, hay una clave para pensar no sólo las resistencias al modelo extractivo, sino también en lo que corresponde a la construcción de alternativas frente a una inminente transición ecosocial que tienen nuestros países del sur global. Sabemos que los feminismos tienen mucho para decir en ese plano, porque cuestionan e impugnan los intentos de transición ecosocial que se proponen desde el norte global, que no se cuestionan las lógicas de consumo y de productividad del capital, sino que sólo proponen una transición de fuentes y mantienen al sur global como su zona de sacrificio. Aquí, los cuerpos feminizados no sólo están en la primera línea de las resistencias, sino que también generan redes de cuidado, de sostenimiento, de apoyo mutuo y autonomía para poder subsistir frente a la agudización de la acumulación y de los tratamientos del capital.
Por su parte, el eje de Hábitat retoma el énfasis que tuvo-durante el año pasado- las demandas construidas desde los feminismos de “tierra para vivir, feminismo para habitar”. Discutiendo así la forma en la que se construyen no sólo las ciudades y los espacios urbanos sino en su relación con los espacios no urbanos, en la provisión de alimentos y los procesos de endeudamiento y hábitat que tienen en los cuerpos feminizados un impacto diferencial.
En diálogo con estos puntos, desde el Programa de Feminismo Global con sede en la Oficina Buenos Aires, se trabajan los diferentes debates y propuestas anteriormente mencionados en clave global, es decir, desde una perspectiva internacionalista. Desde esta iniciativa, se propone fortalecer el intercambio entre los feminismos de los diferentes países. Es decir, una plataforma que colabore con el intercambio y la traducción -y no solamente en términos de lenguaje- sino también del contexto en clave de intercambiar los debates y voces de los diferentes feminismos existentes en el sur global al norte global. De forma que los países de Europa conozcan un poco más sobre los debates que hay en la región. En la actualidad, consideramos que los feminismos de Argentina y Chile tienen un papel protagónico en la lucha, son los movimientos feministas que más fuerza tienen para las distintas colectivas feministas del mundo. Por eso, para nosotres, su experiencia cuenta con una importante fuerza transnacional que elegimos potenciar. En ese sentido, desde el programa, se intentan visibilizar los impulsos que empujan desde el cono sur motivo por el cual este programa -que trabaja en todas las oficinas de la Fundación Rosa Luxemburgo en el mundo- tiene su oficina en Argentina.
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#JunioFeminista en la Oficina Cono Sur de la Fundación Rosa Luxemburgo
A través del trabajo realizado durante el último tiempo por parte de los Programas de Feminismos y Feminismo Global, nos encontramos con una continuidad de discusiones, narrativas, reflexiones y debates ligados a las violencias económicas y sus impactos en la vida de las mujeres y disidencias. Al respecto, nos proponemos recuperar las experiencias cotidianas de las organizaciones y colectivas feministas que se enfrentan día a día al endeudamiento y la precarización de sus vidas a través de un diálogo de saberes entre las diversas compañeras que nos acompañan.
Desde la Oficina Cono Sur de la Fundación Rosa Luxemburgo, creemos que hay mucha potencialidad en el debate de la Argentina y que éste nos permite generar diálogos virtuosos en clave de violencias económicas con los feminismos en otras partes del mundo.
A su vez, como propuesta del Programa Global, este mes estaremos trabajando el eje del trabajo doméstico en clave transnacional. Entendemos que en la actualidad, las cadenas de cuidados son una problemática feminizada y racializada y, por ende, necesaria de abordar. Nos referimos a cómo las mujeres migrantes trabajan en las casas de otras mujeres y/o familias en otros países del mundo. También nos proponemos genear instancias de diálogos y encuentros entre las luchas de las trabajadoras, con las luchas feminista y sindical a través de un dossier (en inglés).
Agenda de actividades:
10/6 Presentación del Micrositio“Violencia económica: Herramientas para la organización feminista”: Luego del lanzamiento del micrositio, realizaremos una presentación colectiva y con todas las organizaciones territoriales que participaron en la iniciativas, MNCI – Somos Tierra, Asamblea de Mujeres – FOB Autónoma, UST – Campesina y Territorial, La Poderosa, Colectivo Yo No Fui, Colectiva Feminista Tatagua, Grupo de Investigación e Intervención Feminista -GIIF, Feministas del Abya Yala y la Cátedra Virginia Bolten, con la coordinación de la periodista Ana Cacopardo. A través de estas experiencias nos acercamos a las diferentes problemáticas territoriales del movimiento campesino indígena, villeros urbanos, populares, cooperativos y sindicalistas de base para conocer sus propuestas de resistencia y construcción de alternativas para la vida digna.¡Accedé al micrositio completo haciendo clik aquí!
14/6 Presentación del Webinar “Trabajo doméstico” junto a Betty Abah (CEE-HOPE), Deborah Carlos-Valencia (MELISSA – Network of Migrant Women in Greece) y Maya John (Sindicato Gharelu Kamgar Union) : La explotación de las trabajadoras domésticas constituye un pilar fundamental de la economía global contemporánea. El mismo se encuentra estrechamente relacionado con la desvalorización de los trabajos de cuidados feminizados, así como con los legados coloniales y el racismo que este implicó. En consecuencia, las trabajadoras del hogar enfrentan enormes obstáculos para luchar por sus derechos y, al mismo tiempo, tienen un papel fundamental como protagonistas de la transformación social . Junto a las expositoras nos preguntamos: ¿Cómo funciona la organización en este contexto? ¿Cuáles son los objetivos inmediatos de las trabajadoras domésticas y cómo pueden vincularse a una visión transformadora más amplia? ¿Cuál es su relación con los movimientos sociales feministas y antirracistas, sin mencionar los sindicatos. Evento: Shaking the Foundations of the Global Economy
17/6 Presentación del libro “¡La Huelga General Feminista va!” de la Coordinadora Feminista 8M de Chile: Se trata de una sistematización de todos los procesos de huelga feminista que se hicieron en Chile durante los últimos años. El libro reúne voces, documentos y testimonios sobre las huelgas feministas y se realizó en conjunto con la Editorial Tiempo Robado. En esta actividad, nos centraremos en las experiencias de levante popular y feminista que tuvieron lugar en Chile tras el estallido social de 2019 en diálogo con la experiencia del Ni Una Menos de Argentina junto a la economista feminista e integrante de GIIF, Verónica Gago.