Según proyecciones del FMI, producto de la crisis económica, el PIB de Chile caerá en 4,5% en 2020, la cesantía se elevará al 18% y la pobreza llegará al 14% del total de la población. Este año la recesión será una realidad y las autoridades deberán implementar medidas para enfrentar esta crisis.
La opción neoliberal nos conducirá a una profundización de la privatización, híper concentración de la riqueza y el ejercicio arbitrario del poder económico y político, acompañado de una profundización del bloque dominante en la sobre-explotación, y el aumento de la desregulación y la flexibilidad laboral amparada en un creciente desempleo que contenga los reclamos laborales.
Creemos que el camino debe ir por otro lado, la crisis debe ser entendida como una oportunidad para corregir la profunda desigualdad económica y política y avanzar en la refundación de Chile. Así, el desafío es reactivar, redistribuir y democratizar.
Actualmente, la cesantía en el Gran Santiago, zona urbana que concentra el 40% de la población del país, es del 15,6%, principalmente en las áreas del comercio y la construcción. La cantidad de personas sin trabajo en la capital ya superó las 469.000 y en todo el país el 1.200.000.
Según la Cámara Chilena de la Construcción, el déficit habitacional (2017) alcanzaba las 739.603 viviendas para 2.2 millones de personas. El MINVU ubica las cifras en casi 400.000 unidades nuevas (déficit cuantitativo) y 1.3 millones de viviendas que requieren al menos un mejoramiento (déficit cualitativo). Vale decir, la cifra se ubica entre 400.000 y 700.000 viviendas.
Producto del aumento del valor del suelo y la vivienda, estas cifras venían creciendo de forma acelerada la última década, con la actual crisis se espera que este déficit crezca de forma aún más acelerada, afectando de forma directa a cerca de 2 millones de personas.
*Debemos avanzar en soluciones para la vivienda y el desempleo*
SINTESIS: La crisis económica actual eleva los indicadores de cesantía (en construcción) y el déficit habitacional.
¿QUE PROPONEMOS DESDE UKAMAU?
- En lo estratégico proponemos una Empresa Nacional de Construcción, a través de una política contra recesiva enfocada en el financiamiento público de la construcción de viviendas sociales e infraestructura.
- En lo inmediato un plan nacional de emergencia de construcción de viviendas de interés público que avance contra el déficit habitacional y el desempleo.
FINANCIAMIENTO:
Debido a que el financiamiento de estas empresas será público se deberán enmarcar en un programa gubernamental que establezca estándares y plazos, la propiedad podrá ser privada, mixta y pública, y estará dirigida a reducir la cesantía y el déficit habitacional de los grupos sociales de menores ingresos.
De esta forma, también se podrá reajustar el valor del suelo y la vivienda que actualmente se encuentran desacoplados del resto de la economía. Eliminando de forma permanente una de las principales causas del déficit habitacional.
FINANCIAMIENTO PÚBLICO
DIRECCIÓN:
El programa en su plan estratégico (Empresa Nacional de Construcción) y en su implementación inmediata (Plan de Emergencia), deberá ser dirigido por los organismos que el MINVU dispone a nivel nacional. En la elaboración de los proyectos se deberá aplicar una nueva gobernanza en materia de ciudad constituida por: los habitantes de cada territorio, para que tengan así participación activa en el diseño de los proyectos; deberá ser ejecutado por entidades de gestión compuestas por representantes del Estado, las empresas (privadas, mixtas, públicas), proveedores de insumos de construcción, los municipios y organización de los asignatarios (organización de pobladores). Así se institucionalizará la participación ciudadana en esferas relevantes de la vida social, fortaleciéndose la democracia.
JUNTO CON POBLADORES
INSUMOS: Con el objetivo de aminorar la desocupación, creemos importante que en concordancia con la Empresa Nacional de Construcción se impulse una Empresa Nacional de Insumos y Materiales de Construcción. Esta iniciativa tendrá la finalidad de aminorar aún más el desempleo tras la crisis en curso, debe impulsar una pequeña industria que suministre a la Empresa Nacional de lo necesario para la construcción de viviendas en una primera instancia, en perspectiva de avanzar en la construcción a futuro de otras infraestructuras de mayor envergadura.
La Empresa Nacional de Insumos y Materiales de Construcción debe desarrollar productos innovadores y de calidad capaces de responder a las exigencias de las distintas zonas geográficas de nuestro país, aprovechando los recursos propios y priorizando la construcción efectiva del nuevo Chile por sobre las exportaciones.